Estaba bastante deseoso de ver la segunda entrega de esta magnífica serie, cuya primera temporada me pareció grandiosa. Y he de decir que siempre suelo comentar las cosas originales de tales series. La saga American Horror Story aprovecha los mismos actores encuadrados en otras circunstancias y ejerciendo otros papeles en las siguientes temporadas, no recuerdo haber visto esto nunca antes. Al principio te pierdes un poco porque la mente te traiciona y te lleva a recordar al personaje anterior, pero a los pocos capítulos ya has cogido el hilo.
En mi opinión ésta entrega es más floja que la anterior y explicaré bajo mi punto de vista el por qué. Aquella giraba todo en torno a una casa y a unos espíritus de personas que habían muerto en su terreno y que ya no podrían salir de allí. Esta gira toda la trama en un manicomio, donde a priori la locura, la tragedia y la oscuridad de la ambientación prometía más. Pero no van por ahí los tiros, ni espíritus de difuntos ni nada de nada, algo de extraterrestres y un asesino en serie. Juzguen ustedes mismos.
SPOILER: El manicomio es un lugar abandonado a la suerte de Dios, donde hay un Monseñor que es quien manda, una hermana Jude quien dirige el cotarro y un ex-nazi que hace experimentos con los enfermos con el consentimiento del máximo mandatario.
Monseñor Howard, hermana Jude y el doctor Arden
Entre los internos llega Kit Walker a quien acusan de ser el asesino en serie de varias mujeres que son despellejadas y allí se le da un tratamiento especial para curarlo, de eso se encarga el Doctor Thredson, quien al final resulta ser el auténtico asesino apodado cara sangrienta.
Kit siendo apresado
Doctor Thredson
Entre medias entra una periodista Lana, que quiere hacer un reportaje sobre el centro y ganar así un prestigio en su carrera, el tiro le sale por la culata y es ingresada en el centro. Donde sufre vejaciones y sufrimiento, es rescatada por el Doctor Thredson quien la lleva al lugar donde mata a las mujeres y la viola. Ella consigue escapar y le cuenta todo a Kit, así que ambos preparan una trampa y graban su confesión, luego Lana le pega un tiro en la cabeza y a Kit lo dejan en libertad y ella es dejada libre.
La periodista Lana
En el presente Lana es entrevistada y cuenta varias cosas interesantes, como sus esfuerzos por cerrar el manicomio, el suicidio del Cardenal Howard por su mala conciencia o como la hermana Jude fue acogida por Kit hasta que falleció.
Lana siendo entrevistada
Al acabar la entrevista y quedarse sola en casa, su hijo la espera para asesinarla, pero ella con sus dotes psicológicas invierte la situación y es él quien acaba asesinado. FIN SPOILER.