Defender a Jacob es una serie basada en la novela homónima, que sigue la historia del ayudante del fiscal Andy Barber que ante un caso de asesinato, ve como todas las pruebas conducen a su hijo. ¿Será culpable o inocente? ¿Pondrá primero Andy la justicia o el amor a su hijo?
Últimamente me he inclinado más por las miniseries, más directas y menos extensas. Esta me ha gustado bastante no sólo por el hecho de mezclar tantos géneros como el misterio, procedimiento judicial y drama familiar. En especial haré hincapié en éste último. Veremos el proceso de destrucción de una familia, cuando te ocurre un hecho tan dramático, da igual que seas inocente o culpable.
SPOILER: Andy, Laurie y Jacob forman la familia perfecta, con una posición social muy acomodada dada la profesión de Andy, ayudante del fiscal y muy conocidos en el pequeño pueblo donde habitan. Un día aparece el cadáver de un chaval del instituto de su hijo y Andy acude como de costumbre a trabajar, a medida que se van encontrando pruebas, todas apuntan hacia su hijo Jacob y esto lo cambia todo.
No sólo lo apartan del caso por ser miembro directo del acusado, sino que poco a poco verá como su vida se va viniendo abajo, a su hijo lo señalan por todas partes, a él sus amigos y compañeros de trabajo le dan la espalda casi todos, a su mujer ya no la quieren en el centro donde trabaja.
Andy debe contratar una abogada especialista en el tema y a pesar de que no sólo las pruebas apuntan al chaval, sino que su comportamiento invita a pensar así, se mueve por páginas de internet un poco salvajes y muy crudas, posee una navaja que coincide con la que acabó con la vida del chico y su forma indiferente, no lo deja en muy buen lugar ante la sociedad.
Joanna Klein sabe que todo apunta muy negativamente, pero ella sólo intentará crear una duda en el jurado y así obtener la libertad de Jacob, también hay que puntualizar que hay un vecino en el barrio que ya ha sido condenado por problemas con menores. Es aquí cuando aparece después de muchos años, la figura del padre de Andy, de quién se separó hace muchos años. Quiere ayudar y Andy se lo impide, pero éste sigue adelante por su propio riesgo y cuenta. Aprovecha a uno de sus hombres y actúa como vigilante de su hijo y nieto. Con el tiempo hace que este hombre se introduzca en la casa del pederasta y lo obligue a escribir una nota de suicidio y lo asesina. De este modo Jacob queda libre de toda condena.
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